miércoles, 25 de mayo de 2011

Viendo tan solo lo que quiero ver.


Ya estoy de nuevo pensando en el próximo año, de nuevo, de nuevo. ¡Rayos!

Estoy considerando una vez más que quizás comencé a enloquecer otra vez como me suele pasar. Tengo ganas de culpar a la llegada del invierno, el frío, esas ganas de andar en pijama todo el día, la extraña sensación de mocosidad y tos, el frío, la lentitud con la que pasa el tiempo, el frío, los días cortos, el frío... Odio abrigarme y mover poco los brazos porque las tantas camperas y la bufanda apenas te permiten unos minúsculos movimientos.
El ruido del secador de pelo, y ver tu cabellera absolutamente erizada, saber que si salís recien bañada y con la cabeza mojada volves con las más desesperantes yagas. Y no, no quiero ir al doctor, odio eso. Mis padres no se cansan de escuchar: "Es una gripe ligera, le voy a mandar tales medicamentos", siempre es lo mismo, para eso tan solo hubiesemos pasado por la farmacia.
De pronto me aburro de ver siempre las mismas caras, tenes que quedarte adentro porque si salís afuera parecieras congelarte (y no creo que me vea bien en aspecto rectangular, como de cubito de hielo).
No quiero saber nada ni de Historia, ni de Biología, mucho menos Matemáticas! Pero como si me leyeran la mente, mis lindas profesoras siempre llegan, abrigadas como yo, con dolor de garganta, los ojos chiquititos y la nariz roja, pero aún así no me regalan horas libres.
Pero entonces recuerdo que no es para siempre, que pronto pasará, que llegará la primavera y me sentiré libre y feliz de nuevo. Podré ir al árbol y sentarme a fumar como antes, correr por todas partes, saludar a todo el mundo. ¿Por qué no puedo hacerlo ahora? ¿será el frío una respuesta útil?

No tiene sentido que piense en la primavera, estoy en otoño y hace frío, y se viene el invierno y hará aún más frío, pero no puedo esperar llegar a una mejor estación, debo convertir el gris en verde, mi invierno puede ser mi primavera. El hoy es lo importante, no puedo perder días esperando las flores, mejor podría cosechar mis plantas al frío, pintarlas, ver que la nube negra aquella que se acerca con lluvia, de pronto es rosa y caen caramelos.

Porque la vida es así, es lo que yo quiero ver.

No hay comentarios:

Publicar un comentario